Nuestro blog, principalmente, trata sobre las desigualdades que encuentra la mujer en la situación actual. Pero no sólo la mujer se encuentra en desigualdad, existen también otros sectores de la sociedad en situación similar, que también merecen ser nombrados en este blog.
En la sociedad española, podemos encontrar los siguientes grupos sociales según Harold R. Kerbo:
- Clase alta, correspondería a las familias que poseen grandes propiedad y autoridad derivada de éstas.
- Clase corporativa, personas con gran autoridad y poder en grandes corporaciones o en el Estado (ej. Altos ejecutivos)
- Clase media, formada por aquellas personas con pocas propiedades, pero posiciones medias y altas en lo que se refiere a ocupación (desde médicos a oficinistas)
- Clase trabajadora, las personas con pocas o ninguna propiedad, con posiciones medias o bajas en la ocupación, y poca autoridad.
- Clase baja, ésta estaría formada por personas sin propiedades, a menudo en paro y sin autoridad. (gente denominada comúnmente “pobre”).
Según esta clasificación, las principales desigualdades que encontramos son:
- Desigualdad en la renta
- Desigualdad de la riqueza
- Desigualdades en los artículos de primera necesidad
Desigualdad en la renta
La estructura ocupacional es un factor de primordial importancia en la creación de una distribución desigual de la renta. La renta es el dinero, salarios y pagos que se reciben periódicamente a cambio de una ocupación, o como rendimiento de una inversión. Resulta evidente que la renta de una persona de la clase corporativa que trabaje en un alto cargo del Estado, será notablemente más alta que la de una persona de clase trabajadora.
Desigualdad de la riqueza
La mayoría de la gente usa sus ingresos para satisfacer las necesidades cotidianas; una riqueza abundante suele proporcionar renta, poder e independencia. Se puede transferir de generación en generación con mayor facilidad que la renta, hecho que produce una mayor herencia en lo referente a la posición social y de oportunidades en el sistema de estratificación. Por estratificación social, entendemos la institucionalización de la desigualdad en un sistema de relaciones sociales determinada.
Desigualdades en los artículos de primera necesidad
Visto el grado de desigualdad de la renta y la riqueza, parece obvio que debe haber otros bienes materiales desigualmente distribuidos. Pero la desigualdad de la renta no siempre es un indicador del modo en que se distribuyen los productos básicos, porque el Estado proporciona subsidios que cubren las necesidades primarias y debemos tener en cuenta el coste relativo de los artículos de primera necesidad. Así pues, aunque la distribución de la renta sea muy desigual, la cobertura de las necesidades primarias podría ser menos desigual si el coste de los productos básicos fuese bajo, de modo que la desigualdad afectaría a los lujos y los ahorros.
Por otro lado, y por suerte, en España contamos con un sistema sanitario público que favorece a las clases económicas bajas, ya que la falta de dinero, no hará que no puedan contar una asistenta sanitaria en condiciones. Y, para aquellas personas con poder adquisitivo alto, también existe la asistencia sanitaria privada.
Las divisiones de status son muy importantes para comprender cómo se mantiene la estratificación social, por ejemplo, los individuos de una clase determinada suelen establecer fronteras de status basadas en los estilos de vida, que excluyen a las clases inferiores para proteger sus privilegios. Estas divisiones de status pueden generar diferentes grados de autoestima y autoevaluación que hacen que la gente acepte su lugar en el sistema de estratificación y admita su legitimidad.
Por otro lado, en la película La Clase de Laurent Cantet, se nos muestra una clase de estudiantes de secundaria, un lugar donde las diferencias sociales se manifiestan de una manera más evidente. En esa clase encontramos alumnos inmigrantes y nativos de Francia (lugar dónde se ambienta la película), más o menos conflictivos, de diferentes razas, diferentes ideologías… En definitiva, personas de diferentes clases sociales. Así, pretende concienciar de los problemas de integración de los inmigrantes y nos invita a reflexionar acerca del respeto entre las personas en cualquier situación social. Además, la película también critica directamente el sistema de enseñanza francés. Mediante un alumno conflictivo de nacionalidad africana, cuyo comportamiento y notas son reprochables, y sobre el que se aplica un consejo disciplinario que concluye con la expulsión del alumno del instituto, dándolo por “perdido” en lugar de aplicar sobre él una serie de medidas que ayuden a mejorar su actitud.
También, el último día de clase, una alumna de color se acerca al profesor y le confiesa no haber entendido nada durante el curso, pero admite no tener intención de esforzarse, ella misma se da por “perdida”.
De esta manera, la película critica el sistema educativo al no hacer nada por aquellos alumnos que necesiten un “empujoncito”, y más atención por parte del profesorado.
Aunque la película haga referencia al sistema educativo francés, esa crítica es perfectamente aplicable a cualquier sistema educativo. En general, se suele ser más atento con aquellos alumnos de calificaciones medias o altas, abandonando y dejando de lado a aquellos otros que necesitan más atención.
Eva Fabregat Segarra
